Óleo sobre tela

2 x 1.5 m     2,004.

Este es hasta ahora el mejor retrato que he hecho de una persona.   Es lo más fiel a mi visión de aquel momento en que la observaba unos metros sobre mí, mientras, yo me paraba dentro de la fosa de las víctimas de la masacre de Panzós (1978).  La mujer que lideró aquel doloroso y necesario proceso de exhumación María Maquín Cacao. 

La línea y la luz de cuando tienes el honor de observar lo real.  ¡Qué orgullo!

Código: 02.2.09.05